Te preguntas: ¿Dónde está la evolución? ¿Cómo saber si estoy allí caminando?
Los pequeños detalles y la sencillez, la has olvidado, pones mucho énfasis en los resultados, aún te pesa la comprensión absoluta de lo que acontece a tu alrededor.
¿Y si volvieras hacia atrás en la curva del pasado y te encontrases con la gran abundancia que en tu corazón germina? Si te dieras cuenta de que todo lo que andas buscando en realidad ya lo tienes y está allí brillando, en el fulgor de tus ojos y en la dirección de tus pies.
Al pasado le has temido o a él te has adscrito, pensando que todo está dividido y por grupos clasificado, pero el pasado es el sendero de tu experiencia, sabiduría, de todas las experiencias vividas. Sí, tal vez percibas heridas que pululan dolor con susurros y ecos que entiesan tu piel y hacen que tu estómago se retuerza en su centro, pero también, detrás de esa densa capa de neblina hay un elemento que tu mente no mira: que tú eres creador(a) y que tu cuerpo conoce el lenguaje de la existencia misma.
Tu llevas la forma entre tus pensamientos; pero mira que fuerza llevan tus vientos; soplan y soplan en tu entorno, brindando movimiento a todo lo estático. Humano, ¡qué privilegio! Porque conoces los sonidos de todo lo despierto, lo que activo se encuentra en vida, transitando en el benigno y divino ritmo y sus melodías.
¿Qué es la evolución? Lo llevas pensando mucho tiempo, que has creado lo que llamas la estructura de la razón, de la lógica y todo su sustento: comprobación, estudio, investigación, descripción. Crees que todo es una línea recta y te anticipas a decir que estás en bienestar que no necesitas nada, que en soledad tu puedes.
La evolución es un proceso de tejidos adversos; vienen para tu corazón, para tu mente, para tu cuerpo. ¿Qué tal va tu instinto? Tus ancestros cantaban a la luna y al Sol, diciendo que eran espacios conectados a la Creación ¿Qué tal va tu fuerza y tu convicción? Tus abuelos decían que ello se lleva en tu voz. ¿Qué tal se mueve la chispa de la incomodidad? Aquellos que vinieron antes le llamaban el preámbulo de la otra verdad; la nueva, la visitante, la que en maestría se habría de anclar.
Entonces la evolución no está delante de ti, sino detrás, al lado, a la izquierda a la derecha, por todos lados donde vas. ¿Por qué conservas ese esqueleto externo? Hay uno alrededor de tus células y tu cuerpo; confía en lo que llevas dentro, pues eres un organismo entero. Lo que llamas ecosistema eso es justo lo que en tus entrañas se manifiesta: una fiesta y festín de flora, de fauna, eres un paisaje perfecto.
Para regresar a lo que olvidaste, dedícate a cultivar la esperanza, la confianza, la seguridad de que lo que estás haciendo rebasa la funcionalidad; todos los hijos e hijas tenemos una tarea global, la de sostener el cambio, la de regular lo nuevo, la de apoyar la paz.
Entonces tú que antes te llamabas guerrero y en defensa venerabas la agresividad, ahora llámate portador y guardián de la esencia Cristal; donde el amor sea el vínculo que creas para abrirte paso desde las tinieblas del miedo, de la ignorancia y del temor hacia los senderos de la hermandad, de la amistad y del ardor del brillo sagrado que salta en el interior.
Almas todos somos, vestidos de verde, de azul.
Almas todas somos, más allá de la planitud.
Almas de sonidos, de colores, de sueños y anhelos vivos.
Almas con orígenes diversos y nombres distintos, pero con el mismo verso:
La celebración y el sostén de la aventura de la forma precisa y puntual:
El cuerpo.
Para conectar con el todo, zambúllete en el espesor del color, déjate guiar por el olor y el sabor, todos tenemos las notas del agua, la humedad, su nido, su sinceridad. Sumérgete en la profundidad de los ojos que te miran, de las garras que te tocan, del aullido, del ladrido que te encuentra sorprendido. Refúgiate en la dulzura de los pétalos conmovidos por la canción del cuna del viento niño.
Allí esta tu Madre, tu Padre, tu Hijo, tu Hija, todos los que amas, los que extrañas, todos quienes contigo, una sola existencia son.
Viva GAIA, Gea- Na- NamaKa.
Viva E-i – on .
Mensaje a través del Hada Manewa de Mu; canal Miel BelleForêt
Comentarios recientes